Que un modelo de zapato sea perfecto para alguien no quiere
decir que sea el idóneo para todo el mundo. Cada pie es diferente y el zapato
que a una persona le puede ir genial, a otra le puede resultar incómodo o que
no le sujete bien el pie, por tanto, al comprar un zapato de baile, tendremos
que tener en cuenta algunos aspectos.
LOS MATERIALES
Sabemos a simple vista que un zapato es de buena calidad cuando los remates del zapato y terminaciones son limpias y bien acabadas. Los
materiales utilizados son de buena calidad y no como algunos que al tocarlos se
nota el plástico, algo que al poco tiempo puede causarte algunos problemillas a
la hora de usar el zapato.
EL TALON
Al ponerte el zapato, el talón debemos notarlo bien sujeto.
Además, los zapatos van cediendo con el uso, si al probártelos por primera vez
el talón lo notas suelto, con el tiempo no va a sujetar nada el pie, lo que
podría provocar que en algún giro o algún movimiento rápido, el talón se mueva
provocando una torcedura o caída.
EL ANTEPIE
La zona delantera del pie deberá ir igualmente bien sujeta.
Intentaremos que el modelo de zapato que escojamos sea lo más parecido a un
guante para nuestro pie. Como ya hemos dicho anteriormente, todos los zapatos
ceden con el uso, por tanto, en la primera puesta debemos notar una presión en
el pie para que, al ceder, el zapato se adapte perfectamente al pie sin que
quede excesivamente suelto. Hay muchos diseños diferentes, más abiertos de
delante o menos, con tiras finas, anchas, ajustables… Intentaremos siempre que
los dedos vayan bien sujetos dentro del zapato. Por ejemplo, en zapatos de
tiras que vayan separadas, pondremos atención al dedo meñique del pie, ya que
puede ocurrir que si la tira no coge bien éste dedo, al bailar, el meñique
tienda a salir del zapato pudiendo resultar algo incómodo.
LA PLANTILLA
La plantilla de un zapato de buena calidad irá bastante
acolchada en la parte del metatarso ya que es donde más van a presionar los
pies debido al tacón. Una plantilla de mala calidad en poco tiempo pierde
consistencia y el apoyo del pie es cada vez más duro. Los zapatos de calidad
superior suelen llevar una plantilla viscoacolchada que proporciona mayor
comodidad al pie.
EL TACON
Si hablamos del tacón, ahí ya entra en juego la destreza y
costumbre que tenga la persona al andar con tacones. Debemos tener en cuenta
que son zapatos para bailar, no para salir a pasear tranquilamente. Durante el
baile efectuamos giros y movimientos rápidos de pie, así que el tacón elegido
nos tiene que proporcionar estabilidad y seguridad a la hora de bailar. Elegir
un tacón alto simplemente por que queda más bonito, podría ser un error si a la
hora de bailar vamos con miedo a poder caernos. El zapato de baile elegido debe
proporcionarnos comodidad y seguridad para aguantar las horas de baile que
queramos.
En definitiva, un zapato de baile debe ser cómodo, que
sujete bien el pie y que nos proporcione estabilidad para bailar. Teniendo en
cuenta estas cosas, sólo queda probar diferentes modelos para elegir tu zapato.
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